El título castellano es en realidad una sinopsis (mucho más expresivo, por cierto, el título original). Un anciano nonagenario atraviesa Gran Bretaña en autobús para cumplir el deseo de su mujer, fallecida recientemente. En el viaje, además de recordar su pasado conocerá la variedad de un mundo para él ajeno.
La magistral interpretación del veterano Timothy Spall es el eje sobre el que gira esta road movie crepuscular que recuerda mucho a Una historia verdadera, el notable título de David Lynch.
El escocés Gillies MacKinnon cuenta la historia en dos tiempos; uno, el interior, el del pasado y otro el exterior, el contacto del misterioso anciano con sus compañeros de viaje. A través de este doble viaje traza un cuento nostálgico y esperanzado sobre el amor de una pareja, la paternidad, la muerte y la necesidad de compañía que tiene el ser humano. Una película de tempo lento digna de ser degustada por paladares no necesariamente cinéfilos, pero sí abiertos a maneras diferentes de narrar las cosas.
Ana Sánchez de la Nieta
@AnaSanchezNieta