Una tormenta azota un pequeño pueblo de Maine y corta la corriente eléctrica. Al día siguiente muchos, entre ellos el pintor David Drayton y su joven hijo Billy, acuden al supermercado en busca de provisiones, donde quedarán aislados por una espesa y anormal niebla. Durante un buen rato vemos a los diversos personajes encerrados allí: militares de una base cercana, incómodos vecinos, cajeras y dependientes. A los primeros comentarios jocosos sucede la inquietud, y después el miedo, cuando queda claro que hay algo maligno ahí fuera. La pequeña comunidad se dividirá en dos: unos buscan la salvación en el pragmático David Drayton; otros seguirán a la iluminada señora Carmody, que rápidamente ha visto en la niebla una señal del cielo.
Dentro del género de terror hay un cliché que cuenta las aventuras de un pequeño grupo atrapado en un lugar claustrofóbico esperando el final. Es un tipo de terror eficaz, que sugiere más que muestra, y se deleita en las reacciones de la gente: de ahí que una película como esta, más bien de serie B, tenga en el reparto algunos nombres tan interesantes como Thomas Jane, Marcia Gay Harden y Toby Jones. El primero encarna no sólo al hombre de acción, sino al buen vecino, esposo y padre, preocupado por todos; la segunda tiene el difícil papel de iluminada, capaz de seducir a muchos y llevarlos a una locura pseudorreligiosa; el inefable Toby Jones está inmenso en su papel de encargado de la tienda, lleno de humanidad y sentido común.
La tercera película que realiza Darabont basada en obras de Stephen King (Cadena perpetua, La milla verde) es una obra menor al lado de las dos anteriores, pero no es despreciable. Reaparece uno de los temas favoritos del novelista: el pánico de una comunidad asediada por algo extraño, las reacciones humanas en situaciones extremas, la religiosidad buena y la mala, el sentimiento de culpa. En definitiva, una película de terror de corte clásico, llena de sustos, entretenida para los amantes del género, con un marchamo de calidad que le da peso y la hace superior a la media.