Director: Mark Waters. Guión: Peter Tolan y Leslie Dixon. Intérpretes: Reese Witherspoon, Mark Ruffalo, Donal Logue, Dina Waters, Ben Shenkman. 95 min. Jóvenes-adultos. (SD)
A sus 41 años, Mark Waters dirige su quinto largo, una de esas películas «bonitas» que gusta ver de vez en cuando. David es un tipo solitario con cara de angustia que alquila un luminoso apartamento con vistas a la bahía de San Francisco. Cuando aparece la propietaria -una médica hiperactiva y requetemandona-, la cosa se complica. Hay más y el asunto no es tan sencillo, pero mejor no contarlo.
«Just Like Heaven» (seguimos padeciendo estúpidos títulos en español que, además de anodinos, no tienen nada que ver con el original) es una comedia romántica a la salsa fantasmagórica, basada en una novela de Marc Levy, con una simpática y expresiva Reese Witherspoon a la que acompaña el eficaz Ruffalo. Los guionistas Tolan («La pareja del año» ,«Una terapia peligrosa») y Dixon («Sra. Doubtfire», «Cadena de favores»), aun siendo casi siempre excesivamente convencionales y, a ratos, tópicos y frívolos, ponen sal y simpatía en una historia divertida y tierna. Hay varios «gags» logrados (esa madre que batea con la espumadera mientras cocina y habla por teléfono) y mejor gusto del que caracteriza a buena parte del cine norteamericano de consumo.
Alberto Fijo
