Debate. Madrid (2003). 240 págs. 16 €. Traducción: Inés Bértolo.
Paul Bourget (Amiens 1852-1935) fue un conocido escritor francés, académico y pensador. Sensible a las corriente filosóficas, vive con pasión los movimientos culturales y sociales de su época -para acabar decantándose hacia un pensamiento cristiano- en una Francia que se debate en la inquietud política y llega a la convulsión de la guerra franco-prusiana y de la Comuna de París. Escribió ensayos, novelas y poesía, y a su vez influyó en algunos otros escritores e intelectuales europeos.
El discípulo es una novela de tesis, con formas muy románticas, en la que a través de la psicología de sus personajes debate cuestiones relativas al peso ideológico del positivismo frente al espíritu, el determinismo conductual, la responsabilidad moral de los pensadores en la educación de la juventud y otras cuestiones que estaban en la primera línea de la lucha ideológica europea en la segunda mitad del siglo XIX. Adrian Sixte, el protagonista de la novela, es un conocido filósofo. Su pacífica vida de santón laico en una ciudad de provincias francesa se ve perturbada por la citación a un juzgado, para testificar sobre un crimen que se atribuye a un discípulo suyo. A este joven, preceptor del hijo de un noble, se le acusa del asesinato pasional de la hermana de su preceptuado y a él se le plantea haber influido en el proceso ideológico de enajenación mental que ha conducido al joven al crimen.
La narración está escrita con una riqueza expresiva notable y tiene tensión narrativa. Pero la carga romántica y la prolijidad neurótica del relato del acusado, hace que esa parte de la novela peque de lentitud y exceso de páginas, defecto compensado con un quiebro folletinesco que aboca en un final brillante.
Ángel García Prieto