Lo más sugerente de Identidad, el último libro del politólogo estadounidense Francis Fukuyama, probablemente sea el mostrar la importancia que tiene para el ser humano la necesidad de reconocimiento. Frente a los postulados del orden liberal clásico, que cree que la mayor motivación del hombre es la búsqueda racional del propio interés, Fukuyama entiende, siguiendo a Hegel, que el reconocimiento de la propia dignidad representa su mayor aspiración en el plano social. Cuando lo logra, el individuo se siente orgulloso y satisfecho; de lo contrario, surgirá en él resentimiento y humillación.
En la época moderna los individuos reclaman un igual reconocimiento social –Fukuyama lo denomina “isotimia”, jugando con el término griego thymós–, de mod…
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