Herder. Barcelona (2005). 199 págs. 16,50 €. Traducción: María Pons Irazazábal.
Aunque hablar y publicar sobre Europa no estuviera de moda, este libro es oportuno e interesante. Precisamente porque no sigue las corrientes intelectuales al uso, ni roza consideraciones oportunistas, económicas o ideológicas; sino que proclama -ya desde su título- un planteamiento radical y trascendente.
Para Reale, catedrático de Historia de la Filosofía Antigua, las raíces culturales de Europa son filosóficas y se originan en Grecia, con Sócrates y Platón. Las raíces espirituales son las cristianas: Reale muestra la aportación única del concepto cristiano de persona después de ofrecernos en apretada síntesis varios siglos de filosofía. De este modo, la consideración de Europa va más allá de lo histórico y lo político para buscar lo verdaderamente radical: los pensadores imperecederos y la religión revelada. Quien esté iniciado en la historia de la filosofía disfrutará repasando textos clave de Heidegger, Gadamer, Kuhn… y si no lo está, disfrutará con la certera palabra de Karol Wojtyla, Pascal, Patocka, por citar a algunos de los filósofos aquí convocados.
Junto con Dario Antiseri, Reale publicó su conocida «Historia del pensamiento filosófico y científico». Parece que Reale diera por supuesto que tenemos con esos filósofos la misma familiaridad y agudeza de penetración que nos muestra con sus conclusiones. Y así nos ofrece una obra coral, en la que las voces de diversos filósofos apoyan, por su propia fuerza intrínseca, las tesis que defiende Reale. Todos ellos se integran en la herencia platónico-aristotélica, que el cristianismo llevó a su plenitud racional.
La lucidez de Reale se hace patente, de modo particular, en el análisis de los efectos que acompañan a la revolución científico-técnica de la Edad Moderna y Contemporánea, y las consecuencias del cientifismo como ideología. Por su rigor en el modo de abordar las líneas gestoras de la historia del pensamiento europeo, los capítulos centrales hacen que el libro no sea caduco. Por otra parte, Reale conecta con los problemas actuales, especialmente en el primer capítulo y en el último. Recala en la moneda única, Maastricht, la Carta constitucional de Europa, los «eurocínicos» y los «euroescépticos» y se acerca, con la misma perspicacia, a la situación actual de Europa, con análisis sobre Internet y las nuevas tecnologías.
Este libro nació a partir de un trabajo presentado junto con el cardenal Paul Poupard y el filósofo Vittorio Mathieu en un congreso europeo de la Universidad Católica de Roma. Pero, más allá de esa coyuntura, muestra la necesidad de un pensamiento filosófico y radical, que busque la verdad, para empezar a entender cualquier interrogante o problema. En este caso, Europa.
Patricia Morodo