Apóstrofe. Barcelona (1998). 222 págs. 2.800 ptas. Traducción: Cino Calcaprina y Jesús Bermejo.
De fachadismo se moteja a la valoración de la arquitectura exclusivamente por su apariencia externa. Y es verdad que es una reducción muy extendida, incluso entre los propios arquitectos, y hasta sancionada por las ordenanzas municipales que preservan la armonía epidérmica desatendiendo con ligereza lo que, si no es la raíz de la arquitectura, al menos importa tanto como su envoltura: el espacio interno.
Se reedita un libro clásico, esto es, aún actual pese a sus cincuenta años, que enseña, primero, a preocuparse por la arquitectura, y después a saber verla. Con concisión y elegancia, Bruno Zevi, arquitecto y tratadista, escribe auxiliado por contados y archiconocidos ejemplos una historia muy válida del desarrollo del espacio interno y las distintas interpretaciones a las que puede someterse. Una buena piedra angular para un apartado de esta especialidad en una biblioteca.
José Ignacio Gómez Álvarez