Debate. Madrid (1999). 571 págs. 3.900 ptas. Traducción: Flora Casas.
Esta obra (publicada originalmente en 1961) es la primera novela importante de V.S. Naipaul, nacido en Trinidad en 1932 y residente en Inglaterra desde 1950. Basándose en la vida de su padre, Naipaul retrata a un individuo que refleja las complejidades y aspiraciones de una cultura colonial desconocida en Occidente.
La metáfora principal de la novela es la casa que el señor Biswas quiere conseguir y que supone para él la liberación de toda atadura que no le permite vivir su propia vida. En realidad, las diversas casas donde viven el señor Biswas y su familia a lo largo de la novela son símbolos de etapas en su camino. Estas viviendas van subrayando asimismo la compleja relación que establece con su lugar de origen y con su tierra.
A la manera de muchos otros escritores postcoloniales que parten de la tradición literaria inglesa, Naipaul basa la configuración de sus personajes en los de Charles Dickens: personajes que luchan por sobrevivir y encontrar su lugar en un mundo que no les comprende. La caracterización del señor Biswas es el mejor logro de la novela. Naipaul crea un hombre complejo, con los rasgos típicos del hombre colonial, el anglófilo por excelencia, que sueña desde su isla tropical con la gran metrópolis de Londres. Biswas quiere ser un hombre libre, pero está atrapado por una serie de circunstancias: su pobreza, la familia de su mujer, su propia admiración por el poder colonial y todo lo que esto representa. Esta novela resalta la odisea de un hombre que lucha desesperadamente por lo que piensa que debe ser suyo; así podemos trazar el desarrollo de su conciencia, a la vez que sentimos con él sus fracasos y desesperación.
Aunque hay golpes de humor, la novela presenta una visión pesimista del destino de este hombre, incapaz de cumplir sus sueños y superar sus circunstancias. Así como el señor Biswas no puede encontrar en Trinidad los instrumentos que necesita para construir su casa, tampoco halla los instrumentos para «construir» su vida. El mundo al cual pertenece se caracteriza por el caos, y su lucha está en crear el orden, simbolizado en su propia casa.
La esperanza final se apoya en su hijo Anand, que parece ser Naipaul mismo, y en su emigración del país. Desde otra perspectiva, la novela se puede leer como la alegoría de la experiencia de una comunidad hindú asentada en Trinidad, isla que se mantiene ajena a ellos. Esta novela, según Naipaul, nace del periodismo, las historias y los relatos de su padre, del conocimento que había adquirido mirando el mundo con ojos de reportero. La novela se convierte así en el elogio del hijo a un padre que, sin poder realizar sus sueños, de alguna forma le permitió que él sí viera los suyos cumplidos.
Rocío G. Davis