El Black Friday, esa jornada de compras compulsivas, animadas por las rebajas, marcó en EE.UU. un nuevo récord en cuanto a la comercialización de un producto bastante polémico: las armas de fuego. Según la revista Fortune, los propietarios de tiendas de armamento rellenaron ese día 185.713 formularios de chequeos policiales, paso necesario para que el cliente pueda completar la compra de un rifle, una pistola o cualquier otra arma de fuego.
El FBI precisó que ese número de controles excedió en 400 al de los efectuados en 2015. Los chequeos de antecedentes tienen lugar cada vez que alguien trata de comprar un arma en una tienda con licencia federal, y son vistos como un mecanismo para rastrear la cantidad de armas que se venden en EE.UU.
Las ventas de estos medios suelen ser altas en Black Friday gracias a los generosos descuentos, si bien las expectativas de comercialización para la temporada de 2016 eran moderadas, debido a la victoria electoral de Donald Trump. Antes de los comicios, en los que se creía que Hillary Clinton resultaría vencedora, partidarios del derecho a las armas adquirieron cantidades récord de pistolas y rifles, ante el temor de que la demócrata sacara adelante leyes para restringir la tenencia.
Según explica Business Insider, Clinton proponía prohibir los rifles de asalto y la compra de armas por parte de quienes sufran algún trastorno psíquico, mientras que las propuestas de Trump en este tema incluían mejorar la atención de salud mental, pero nada que limitara el derecho a poseer armas.
En sintonía con esto, el fabricante Gunmaker Sturm, Ruger & Co. informó, en su declaración de ingresos correspondiente al tercer trimestre, que la demanda de armas de fuego durante el verano había sido mayor que la usual, probablemente debido a la retórica electoral sobre este asunto.
Ya terminada la carrera presidencial, y al no cumplirse el pronóstico de ver instalada en la Casa Blanca a una presidenta opuesta a la tenencia indiscriminada, las ventas experimentaron un descenso; sin embargo, según los comerciantes, ya están recobrando un impulso. Como se deduce de los chequeos del Black Friday.