Gente esperando el autobús sin mascarilla en el barrio ultraortodoxo de Mea Shearim, Jerusalén (foto: Isabel Rodríguez)
Jerusalén.— Cae el sol en la ciudad santa de Jerusalén. Se escucha el inconfundible sonido de un cañonazo. Marca el iftar, el momento del día en el que se rompe el ayuno del Ramadán. Tradicionalmente, las familias musulmanas se reúnen para compartir esta comida juntos y este año pueden celebrarlo sin restricciones en Israel.
Mientras Europa se blindaba de cara a la Semana Santa para impedir una cuarta ola de esta pandemia que ya dura más de un año, Israel ha vivido la Pascua judía sin límites ni apenas aforos. Estos días de fiesta, que suelen coincidir con la Semana Santa cristiana, son de los más señalados en el calendar…
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