Esta historia real ha sido contada desde muchos puntos de vista, pero en esta ocasión se apuesta por la perspectiva heroica, y más desconocida, de las personas que pusieron en riesgo su vida ayudando a los Frank, hasta que fueron descubiertos por las SS el 2 de septiembre de 1944 y enviados a Auschwitz.
Aunque se sepa el desenlace, esta producción consigue atrapar al espectador desde el primer minuto. Tanto el guion como la estupenda puesta en escena y un destacable nivel de interpretación, contribuyen a la excelencia de esta miniserie de ocho capítulos.
El papel protagonista lo interpreta Bel Powley (The Diary of a Teenage Girl), una actriz a la que merece la pena seguir de cerca. Su actuación aprovecha todo el registro dramático que ofrece un personaje real, Miep Gies, particularmente atractivo por su poderosa convicción moral y su determinación. A Powley le acompañan otros actores de la talla del joven y prolífico Joe Cole (Harry Palmer, Peaky Blinders) y el veterano Liev Schreiber (Ray Donovan).
El guion, a cargo de los experimentados Tony Phelan y Joan Rater (Anatomía de Grey, Madame Secretary), mantiene el interés y la tensión de la situación, dando al mismo tiempo momentos de respiro al espectador mediante el romance de la pareja protagonista y algunas dosis de humor. La historia nos muestra a personas bastante comunes, capaces de llevar a cabo acciones heroicas, a pesar de sus miedos y gracias a su elevado sentido del bien y del deber. Este planteamiento hace que la serie resulte muy adecuada para jóvenes.