Josep M. Colomer, profesor de Ciencia Política en la Universidad de Georgetown, reúne en este volumen sus recientes investigaciones sobre la posibilidad de una democracia mundial. El texto combina un recorrido por las reflexiones teóricas de los politólogos con abundantes datos de buenas y malas experiencias de gobierno contemporáneas.
Es un libro ordenado, riguroso, con abundante información, de lectura amena y asequible para un público no especializado. Pero no es un libro que se limite a describir teorías o experiencias de gobierno más o menos exitosas. El autor profundiza en la cuestión del “déficit democrático” de las instituciones políticas globales. Y pretende mostrar qué procedimientos de toma de decisiones han funcionado mejor para propiciar políticas públicas globalmente beneficiosas.
El libro se centra en analizar con detalle diversas formas de gobierno mundial como las agencias de Naciones Unidas, el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional, los tribunales internacionales de justicia, etc. Se atreve, incluso, a proponer una posible distribución de una asamblea representativa mundial formada por dos mil diputados. Se detiene particularmente a estudiar la historia y la eficacia de las reuniones del G8 y del G20.
Colomer plantea que las prácticas democráticas que funcionan en muchos estados son todavía hoy ampliamente consideradas como inviables cuando se piensa en un gobierno planetario. Sin embargo, algunos modos alternativos, con peculiaridades tales como el derecho de veto en el Consejo de Seguridad, han demostrado ser sorprendentemente útiles. De ahí su gran cuestión: ¿Qué debemos pedir a las instituciones vinculadas al gobierno mundial para considerarlas respetables? A su juicio, un buen diseño institucional del gobierno mundial debe “permitir la selección de gobernantes competentes y honestos, favorecer la toma de decisiones eficaces y hacer que los gobernantes rindan cuentas”.
El autor considera que hemos avanzado notablemente en los últimos años hacia modos de gobierno mundial que, sin seguir los patrones más comunes en los gobiernos de los estados democráticos, sin embargo han conseguido generar avances interesantes en la posibilidad y calidad del gobierno mundial: representación cualitativa de los Estados, gobierno de expertos, consenso de políticas públicas mundiales, mandatos imperativos y rendición de cuentas fundamentalmente.